Hace unos meses, un pequeño local de hostelería en Valencia decidió dar un giro a su imagen. Sus dueños notaban que, a pesar de ofrecer un buen producto, pasaba desapercibido en una calle llena de competencia. Fue entonces cuando apostaron por algo diferente: murales publicitarios personalizados en el interior y exterior del establecimiento.

Antes, la fachada era discreta y no llamaba la atención. Tras el mural exterior, con un diseño atractivo y lleno de color, el local empezó a convertirse en un punto de referencia. Los transeúntes se detenían a mirar y sacar fotos, y muchos de ellos entraban simplemente por curiosidad. En pocas semanas, el mural ya era parte de la identidad visual del barrio.

Dentro, los propietarios decidieron reforzar su marca con murales adaptados al estilo del negocio: un diseño moderno en la pared principal y detalles gráficos en rincones estratégicos. El resultado fue un espacio más acogedor, reconocible y con personalidad.
Los clientes comenzaron a compartir fotos en redes sociales, etiquetando el local y dándole una publicidad gratuita que nunca habían tenido.

• Mayor visibilidad en la calle: el mural exterior convirtió el local en un imán visual.

• Incremento de clientes nuevos: el boca a boca y las redes sociales hicieron que más gente quisiera conocerlo.

• Identidad de marca reforzada: ahora el local tiene un estilo único, alineado con su filosofía.

• Marketing a largo plazo: a diferencia de una campaña tradicional, el mural sigue atrayendo cada día, sin costes añadidos.

Un mural publicitario no es solo arte en la pared, es una inversión en visibilidad y marca. Este local en Valencia demostró que con creatividad y estrategia se puede destacar en un mercado competitivo, generar más clientes y crear un espacio que la gente recuerda.

MURALES VALENCIA

¡SOLICITA UN DISEÑO Y PRESUPUESTO GRATIS!